El síncope es una pérdida brusca y temporal de la conciencia y del tono postural, de duración breve y con recuperación espontánea. El síncope se produce por una disminución transitoria del flujo sanguíneo al cerebro.
Definición síncope

El síncope es una pérdida brusca y temporal de la conciencia y del tono postular, de duración breve y con recuperación espontánea. El síncope se produce por una disminución transitoria del flujo sanguíneo al cerebro
- Es un problema frecuente en la población general.
- Es importante no confundir la pérdida verdadera de la consciencia con otros problemas como el vértigo, la ansiedad o un mareo
A diferencia del síncope, la lipotimia es un desvanecimiento pero sin llegar a la pérdida total de la conciencia.
Causas de síncope
Síntomas del síncope






El síncope es una pérdida brusca y temporal de la conciencia y del tono postular, de duración breve y con recuperación espontánea. El síncope se produce por una disminución transitoria del flujo sanguíneo al cerebro
- Es un problema frecuente en la población general.
- Es importante no confundir la pérdida verdadera de la consciencia con otros problemas como el vértigo, la ansiedad o un mareo
A diferencia del síncope, la lipotimia es un desvanecimiento pero sin llegar a la pérdida total de la conciencia.
Causas de síncope
Síntomas de síncope



Tratamiento de síncope
Los síncopes son muy frecuentes y la mayoría son benignos, no necesitando ningún estudio especial. Sin embargo es recomendable acudir a su médico, sobre todo, si se repiten en el tiempo, los episodios son más duraderos de lo habitual o se acompañan de otros síntomas.Su médico realizará una serie de preguntas relacionadas con las características del síncope y con sus posibles causas (Historia clínica) así como una exploración física completa, con especial atención a la presión arterial, al pulso y una exploración neurológica. En algunos casos se puede complementar con la realización de un electrocardiograma y un análisis de sangre.Existe una serie de causas de síncope que pueden ser graves, pero son poco frecuentes, como: arritmias cardiacas (alteraciones del ritmo del corazón), enfermedades cardíacas (patología de las arterias coronarias o de las válvulas del corazón), embolia pulmonar, anemia importante, enfermedades neurológicas (como epilepsia o ictus) o psiquiátricas.

